Aprendí que quién no te busca, no te extraña, y quién no te extraña, no te quiere.
Que el destino determina quién entra en tu vida, pero tu decides quién se queda.
Que la verdad duele una sola vez, y la mentira cada vez que nos acordamos.
Hay tres cosas en la vida que se van y no regresan jamás: las palabras, el tiempo,
y las oportunidades. Por eso, valora a quien te valora, y no trates como prioridad
a quién te trata como OPCIÓN